Sutil

Cuando la felicidad asalta en la mañanas

Por María Xavier

Estirar el tiempo

El minuto eterno

Aún entre las sábanas

Y antes de lo demás

sin pensar ni hablar

El cuerpo, una bolita de algodón

Respiración resuelta

Exhalación total

Palpito, palpito quieto

eterno en el tiempo

A galope oigo el tren, tren, tren

Suave el tac tac de la lluvia al caer

Al perro la vecina grita

Y la ciudad despierta, se anuncia

infinita

Quiero escribir un poema

me digo. Quizá mejor plantar

un jazmín. O de tu mano andar

sin mirar atrás

imagino

Que un viento irredento

Me revuelca por dentro

¿Estoy cuerda? me inquieto

Y solo adivino que estoy

feliz

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